Hacer una campaña de marketing digital parece algo fácil. Al final solo se trata de que su mensaje llegue a la mayor cantidad de gente posible, ¿verdad? Pues no. Una campaña digital es mucho más compleja de llevar a cabo y necesita algo más que “un buen mensaje y un buen canal”.
Hay muchas agencias que llenan sus presentaciones con promesas de resultados espectaculares en número de likers, engagement, participación y métricas por el estilo. La idea es que con una inversión relativamente pequeña en publicidad usted podrá aumentar su audiencia y el alcance de sus mensajes. Si bien esto último no es mentira siempre nos quedará una pregunta: ¿y luego qué?
Estamos seguros de que esa pregunta se ha cruzado por su cabeza cada vez que recibe una propuesta. Su gestión necesita mediciones diferentes. Usted necesita marcar la diferencia con cada una de sus actividades digitales. Un informe bonito no justifica la inversión de tiempo ni de dinero que le tomará montar toda una campaña. Usted necesita resultados concretos y demostrables.
Aquí es donde entra el marketing 360. Esta metodología no solo le ayudará a demostrar el valor de sus acciones sino que les permite hacer un mejor marketing que beneficie a toda la empresa.
Si usted quiere implementar una campaña de marketing 360 debe tener en cuenta que cualquier acción que usted implemente tiene 3 aspectos fundamentales: planificación, ejecución y medición.
Una vez que haya respondido a esas preguntas tendrá la base que necesita para planificar su campaña.
De la misma manera, la situación de su público o de su oferta puede cambiar inesperadamente y el éxito o fracaso de su campaña dependerán de la reacción que usted tenga. Lo más importante al plantear y ejecutar una estrategia es saber que va a necesitar cambios en la marcha y que usted y su equipo deben estar preparados. La gran ventaja del hacer una campaña digital es que sus acciones pueden ser corregidas rápidamente de ser necesario sin incurrir en grandes costos.
La medición de sus actividades no es algo que se debe hacer solamente al final para comprobar los resultados. Es más, su actitud debería ser totalmente opuesta: medir constantemente para poder saber qué está dando resultado y qué no y así implementar cambios efectivos.
Pero estos 3 pasos son solo la punta del iceberg para un proceso de marketing 360. El objetivo final de esta metodología es convertir a su equipo en una máquina de producir dinero pero eso necesita tiempo y esfuerzo. Para saber qué otros pasos debe seguir para poder mejorar sus actividades de marketing descargue nuestro ebook gratuito y aprenda las bases del marketing 360.