Como con todo en la vida, la planificación es la base del éxito y, una campaña política que pretende invertir en Internet, no es la excepción. Antes de pensar qué hacer, dónde tener presencia, qué recursos usar, de qué maneras creativas llegar a los electores, etc., es necesario definir con claridad para qué se va invertir en Internet.
En otras palabras, es necesario tener claras las metas que se busca alcanzar en la web social. Y para esto es preciso investigar, indagar y conocer lo que sucede adentro y fuera del equipo de la campaña, tomando en cuenta estos tres pasos:
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Investigar las necesidades comunicacionales de la campaña
En otras palabras, es preciso investigar internamente cuáles son los puntos en los que la estrategia digital puede apoyar a la estrategia ATL. Para esto, los responsables de la comunicación digital deberán indagar sobre las líneas de discurso político, medios seleccionados de difusión, mensajes clave, acciones específicas, iniciativas colectivas, alianzas, etc., todo lo que le permita brindar un apoyo verdadero a la consecución de objetivos de la campaña. El levantamiento de fondos suele ser el punto más importante de la gestión inicial de las acciones de promoción política, por lo que la estrategia digital deberá enfocarse en buscar las maneras más eficientes de apoyar en este punto.
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Analizar y definir al público objetivo en Internet
Este paso requiere de investigación del comportamiento de los usuarios tanto como de los contendientes políticos, a fin de tener un panorama claro de la situación en la que se desenvolverá la estrategia digital de la campaña política. Esto a su vez, permitirá delimitar un campo de acción, un nicho y un mensaje para lograr un fuerte posicionamiento. Es importante que esta investigación se realice tanto con fuentes secundarias como primarias de información. Un sondeo digital de opinión, un focus group o una encuesta permitirán que la información que se recopile mediante fuentes secundarias (plataformas, estudios, herramientas de análisis, etc.) sea corroborada y tome un matiz diferente.
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Delimitar con claridad los objetivos de la campaña digital
Contando con toda la información mencionada en los puntos anteriores, se puede plantear entonces, objetivos cuantificables y medibles para nuestra campaña digital. Es importante en este punto, tener claro que todas las acciones que se realicen deben perseguir un fin que aporte algo valioso al objetivo de la campaña política en general. También es preciso entender el concepto de conversión, ya que esto nos permitirá diseñar un call-to-actioneficaz. De esto hablaremos en detalle en artículos posteriores.
Con unos objetivos claros, medibles, aterrizados y enfocados en contribuir con la campaña política general, lograremos crear una estrategia efectiva, de gran impacto y que posicione al político o al partido, de una manera sólida y consistente. Y no solo por una candidatura para las venideras elecciones sino, como un personaje público, relevante en la esfera política en todo momento.
¿Qué añadirías en este punto de la creación de una estrategia digital de una campaña política? Déjanos saber tus consejos comentando al final de esta entrada.
